miércoles, 28 de marzo de 2007
Un Pasito mas....
...Y finalmente pasamos a Bolivia. Sellado mediante, ingresamos al país vecino por Villazón. Al son de los mercados callejeros, al son de las comidas en la calle.
Ingresamos por el centro lleno de mercados de todo lo que uno pueda querer (menos plantillas nº 44), la ciudad, con la oferta y la demanda a flor de piel, resultó dinámica y agradablemente agitada después de tanto peace&love de Yavi. Cambiamos nuestros billetes de Sarmiento y Belgrano por unos de Rojas y Moreno.
De ahí a la terminal, caos organizado si los hay, el colectivo de las cinco indistintamente puede ser el de las cinco treinta el de las seis o el de las siete. Hay que estar alerta al grito de Villazón/Tupiza!!
Pero finalmente llegamos bien a Tupiza. Nadie se molestó en preguntar si alguien bajaba, así que casi casi que nos pasamos de largo. Llegamos a Tupiza de noche (tienen un encanto especial las ciudades de noche) y de ahí a la recomendada ¨puerta roja enfrente de la terminal¨. El hospedaje de Sara.
En el día descubrimos que Tupiza por los cuatro costados esta en medio de montañas. Y que Tupiza tiene una pizzeria que se llama Tu Pizza (el ingenio popular presente). Recorrimos los mercados tan típicos tan Bolivianos y a averiguamos por próximo itinerario: El Salar de Uyuni.
Pero antes de seguir adelante y habiendo avanzado tan pausadamente del norte argentino hacia Bolivia, y viendo que los paisajes las formas las gentes tan gradualmente van variando sin cambiar totalmente, sin hacer un quiebre, sino mas bien un degrade; ¿por que hay una linea divisoria geométrica arbitraria e imaginaria q separa esto de aquello?
Mapa Político Nº5 con división Política, que invento mas alejado de la realidad. ¿No?
El corazón de la frutilla
Yavi es pura Puna / Yavi es tierra y adobe / Yavi es un cielo distinto cada día / Yavi es un hombre y una mujer / Yavi es una tormenta gris / Yavi son relámpagos en una noche negra y sin luz / Yavi es una artista respirando aire fresco / Yavi es un río, hermoso río / Yavi son flores amarillas, por todos lados / Yavi son grandes Sauces / Yavi es una sombra acojedora / Yavi es un pajar / Yavi es una bicicleta que llego desde La Plata y aqui se quedó / Yavi son 8 hermanos / Yavi son muchas betas, y muchas lagunas / Yavi es un sol radiante / Yavi son campos amarillos, verdes, de todos colores / Yavi es un perro fiel, que habla / Yavi es una caja llena de cassettes / Yavi es música de todo tipo / Yavi es una noche estrellada.
Deberían conocer Yavi...
Deberían conocer Yavi...
Más y más precipicios...
Son viejos estos videos, pero Bolivia no se lleva muy bien con las conexiones USB. Asi que por el momento esto es lo que tenemos para mostrar.
Camino a la Garganta del Diablo en Tilcara.
Pánico en San Isidro (camino de Iruya a San Isidro)
Camino a la Garganta del Diablo en Tilcara.
Pánico en San Isidro (camino de Iruya a San Isidro)
sábado, 10 de marzo de 2007
Tilcara Headquarters
Rápida y Fugaz dejamos atrás Salta, la Linda... ¿La linda?...
yo creo que si, sólo q no le dimos mucha oportunidad.
De Tilcara a Purmamarca. Hemos pasado el día allí y conocido el marketinero cerro de los siete colores. Un pueblo igual q todos y al igual q todos distinto a todos. se entiende? es la magia del norte.
Desde allí muy turisticamente salimos en combi de turistas hacia Salinas grandes. Un Largo camino por arriba de las cimas y en medio de las nubes, mucha niebla, mucho precipicio, y burros que se cruzan y camiones que pasan camiones y casi nos tiran a la mierda. Pasado el susto, un gran valle blanco se extiende hacia todos lados. Un desierto de sal. Pa' donde se mire. Hasta que la tormenta eléctrica nos invitó a retirarnos. (pucha no pudimos sacar ninguna foto con rayos) .
Y atentos amigos!! Cuidado con su próxima sal de mesa en la mesa familiar, que Pancho ha hecho pis en el mismísimo salar.
De Tilcara a Humahuaca. En realidad iva a ser Iruya, pero había alerta meteorológica y quedamos varados en Humahuaca. Se ve que los ríos pasan por arriba de los caminos allá en Iruya. Humahuaca colonial nos invitó a recorrerla con la excusa de encontrar algún pedacito de pasto verde donde tirarse. De punta a punta en el pueblo, lo encontramos.
De Tilcara a Tilcara. Un poco de Ruinas indígenas reconstruidas (increíble como vivían los indiecitos antes de que llegue el español a cristianizar) , el infaltable cerro de la cruz, y la Garganta del diablo. Dos horas de ascenso, el camino intercaló precipicios, túneles a cuerpo tierra y agua, y al fin una cascada. Fría. No daba para mojarse. Aqui, una pequeña muestra de los precipicios por los que hemos andado.
De Tilcara a Iruya. Buen tiempo en Iruya al fin, reencuentro con amigos de viaje y otros nuevos también y en colectivo 60 norteño ascendimos a los 4000 metros al nivel del mar y poco a poco atrás de los cerros se fue descubriendo el pueblo ahí arriba en medio de la nada como puesto con la mano de Dios (de Dios Padre Todopoderoso, no de Maradona) Que lugar amigos! que lugar! la cereza del postre en el norte tal vez?
Esta vez hicimos noche en carpa. Carpa para dos. O sea para uno chico, según la lógica de las carpas. Teníamos que hacer equilibrio para no tocarnos, pero q dicha levantarse y ver la montaña a través del mosquitero.
yo creo que si, sólo q no le dimos mucha oportunidad.
La noche del ultimo post, el cielo Salteño se partió en baldasos de agua, así que no pudimos hacer otra cosa que compartir una velada con los demás huéspedes del Huespedero.
Y al otro día Partimos hacia Tilcara, donde como peludo de regalo, caímos en la casa de Vicky (prima de Pancho) y Nando (novio de Vicky). Y ya instalados, y haciendo de Tilcara nuestra base de operaciones, la idea era ir y venir hacia los pueblos quebradeños y conocer las ultimas paradas norteñas.
Un hogar de lujo nos ha tocado, Nando, músico de "neo folk" (él detesta ese rótulo pero a mi se me hace muy cul) y Vicky Artesana en platería, tienen un gran grupo de amigos músicos y bailarinas de chamame, así q tuvimos la suerte de compartir un par de noches a toda música y folclore y gatos y vinos de la casa.
Y al otro día Partimos hacia Tilcara, donde como peludo de regalo, caímos en la casa de Vicky (prima de Pancho) y Nando (novio de Vicky). Y ya instalados, y haciendo de Tilcara nuestra base de operaciones, la idea era ir y venir hacia los pueblos quebradeños y conocer las ultimas paradas norteñas.
Un hogar de lujo nos ha tocado, Nando, músico de "neo folk" (él detesta ese rótulo pero a mi se me hace muy cul) y Vicky Artesana en platería, tienen un gran grupo de amigos músicos y bailarinas de chamame, así q tuvimos la suerte de compartir un par de noches a toda música y folclore y gatos y vinos de la casa.
De Tilcara a Purmamarca. Hemos pasado el día allí y conocido el marketinero cerro de los siete colores. Un pueblo igual q todos y al igual q todos distinto a todos. se entiende? es la magia del norte.
Desde allí muy turisticamente salimos en combi de turistas hacia Salinas grandes. Un Largo camino por arriba de las cimas y en medio de las nubes, mucha niebla, mucho precipicio, y burros que se cruzan y camiones que pasan camiones y casi nos tiran a la mierda. Pasado el susto, un gran valle blanco se extiende hacia todos lados. Un desierto de sal. Pa' donde se mire. Hasta que la tormenta eléctrica nos invitó a retirarnos. (pucha no pudimos sacar ninguna foto con rayos) .
Y atentos amigos!! Cuidado con su próxima sal de mesa en la mesa familiar, que Pancho ha hecho pis en el mismísimo salar.
De Tilcara a Humahuaca. En realidad iva a ser Iruya, pero había alerta meteorológica y quedamos varados en Humahuaca. Se ve que los ríos pasan por arriba de los caminos allá en Iruya. Humahuaca colonial nos invitó a recorrerla con la excusa de encontrar algún pedacito de pasto verde donde tirarse. De punta a punta en el pueblo, lo encontramos.
De Tilcara a Tilcara. Un poco de Ruinas indígenas reconstruidas (increíble como vivían los indiecitos antes de que llegue el español a cristianizar) , el infaltable cerro de la cruz, y la Garganta del diablo. Dos horas de ascenso, el camino intercaló precipicios, túneles a cuerpo tierra y agua, y al fin una cascada. Fría. No daba para mojarse. Aqui, una pequeña muestra de los precipicios por los que hemos andado.
De Tilcara a Iruya. Buen tiempo en Iruya al fin, reencuentro con amigos de viaje y otros nuevos también y en colectivo 60 norteño ascendimos a los 4000 metros al nivel del mar y poco a poco atrás de los cerros se fue descubriendo el pueblo ahí arriba en medio de la nada como puesto con la mano de Dios (de Dios Padre Todopoderoso, no de Maradona) Que lugar amigos! que lugar! la cereza del postre en el norte tal vez?
Esta vez hicimos noche en carpa. Carpa para dos. O sea para uno chico, según la lógica de las carpas. Teníamos que hacer equilibrio para no tocarnos, pero q dicha levantarse y ver la montaña a través del mosquitero.
A 7 km de Iruya emprendimos caminata a un pueblito cercano. Sin electricidad ni acceso de autos. San Isidro. Tipo, re lindo. Tuvimos el pequeño error de salir de excursión con una perra alsada. Mientras lidiamos con el terreno una jauría enamorada fue sumándose a nosotros y se disputaba fieramente el amor perruno.
La caminata pautada en dos horas, nos llevo casi seis. Ríos, montañas, cornisas y cañadones fueron los obstáculos. Resbalones, panic attack e incertidumbre sufrió el contingente. Y San Isidro, que lugar amigos! que lugar! la cereza de la cereza. Medio aldea de época medio comarca de hobbits. Tuvimos por el retraso de tiempo q pasar la noche allí, a la luz de las velas al compás de una banda de rock evangelico. Si, un pueblo sin luz, cuya iglesia evangelica tiene generadores para sus guitarras de rock angelical. Es increíble q lleguen a todos lados. Debe ser q las canciones evangelicas tienen mas onda que la de la Iglesia común. Jesús SuperStar!
La caminata pautada en dos horas, nos llevo casi seis. Ríos, montañas, cornisas y cañadones fueron los obstáculos. Resbalones, panic attack e incertidumbre sufrió el contingente. Y San Isidro, que lugar amigos! que lugar! la cereza de la cereza. Medio aldea de época medio comarca de hobbits. Tuvimos por el retraso de tiempo q pasar la noche allí, a la luz de las velas al compás de una banda de rock evangelico. Si, un pueblo sin luz, cuya iglesia evangelica tiene generadores para sus guitarras de rock angelical. Es increíble q lleguen a todos lados. Debe ser q las canciones evangelicas tienen mas onda que la de la Iglesia común. Jesús SuperStar!
Ultima noche en Tilcara partiremos mas al norte del norte mañana. Ayer despedimos al grupo que nos acompaño en este tramo, Melisa, Jose, Carlos y Sabrina ha sido un placer conocerlos. Nos vemos a la guelta.
Viki, Nando, gracias por tan cálido hospedaje. Mañana nos espera una matina de ruta e intento de dedo, rumbo a Yavi (pequeño pueblo cerquita de la Quiaca) y luego: Bolivia!
Viki, Nando, gracias por tan cálido hospedaje. Mañana nos espera una matina de ruta e intento de dedo, rumbo a Yavi (pequeño pueblo cerquita de la Quiaca) y luego: Bolivia!
Para los fanas del blog, les dejamos aqui las mil y un fotos, hasta el artazgo!
martes, 6 de marzo de 2007
Caos Capital
De la estadía en Cafayate aún tenemos la sospecha de que la patrona de casa mando a sus hijos a dormir a otro lado para poder lucrar con sus habitaciones. Fué un cálido hospedaje donde nos íbamos a dormir escuchando los ronquidos del Don patrón y algún que otro borracho nos tocaba la ventana a la madrugada buscando a nosequién.
En Cafayate solo hicimos uso y abuso de la plaza central. Eran tentadores los lugares para visitar, pero aún no nos recuperábamos las ampollas de las caminatas anteriores.
En Cafayate solo hicimos uso y abuso de la plaza central. Eran tentadores los lugares para visitar, pero aún no nos recuperábamos las ampollas de las caminatas anteriores.
El panorama norteño en general ya está casi desprovisto de turistas, somos pocos los que empezamos a viajar cuando se debería terminar.
Y tuvimos q tomar la dura decisión de comprar un reloj despertador. Comprendimos que no puede uno hacerse el que vive sin horarios, solo por impulsos. Con mas razón si en los pueblos las cocinas tienen horarios de apertura y de cierre, y las duchas calientes cortan a tal hora y si los bondis salen en punto a una hora. Así q felizmente hoy nos despertamos con un titití titití titití...PAF!
Por la noche con los demás compañeros de ruta hicimos un asado que era para chuparse los dedos. Literalmente. Ya que como animalitos de Dios comimos con la mano en derredor de un plato común. La noche nos acompaño de lujo y con el rebuzne de los asnos de fondo pasamos un grato momento, al punto de que pasado el tiempo todos entendíamos ingles y alemán y español very very well.
De todas maneras según el organigrama de actividades del día siguiente, teníamos que estar levantados 7.30 de la mañana. Y encima esa misma noche todos los perros del condado se juntaron en nuestra ventana a hacer riña callejera.
Salimos con la fresca para Salta, y de pasada pasamos la mañana en el Río de las Conchas. Unas suculentas murallas montañosas que se tuercen y retuercen y salen para arriba formando gargantas y anfiteatros naturales, ideales para mirar para arriba y pensar que pequeños somos.
Y llegado el mediodía nos dimos el lujo de comer en medio de ese accidente geográficos. Unos sanbuches y un salamin on the rocks.
Y por el momento tal como indica el titulo de este post, estamos nuevamente en una ciudad capital: Salta, la linda. Colectivos, humedad, oficinas. Planeando las próximas trayectorias, y reeviendo lugares, no podemos queres abarcar todo. Asi que me despido. Desde un ciber con 100 computadoras y dos ventiladores. Imaginaos la calor. Hasta la proxima edición.domingo, 4 de marzo de 2007
Estamos en las nubes...
Dejamos Tucumán un día lluvioso y por suerte, con muchísimo menos calor que los 40 grados del día anterior. Próximo destino: Tafi del Valle.
Llegamos por la tarde noche a un pueblito con muy poca gente y bastante vacío. La llegada de la noche y la gran cantidad de nubes por los alrededores no nos permitió ver mucho mas allá del pueblo y sus pequeñas cuadras.
Al otro día comenzó la aventura: caminata a un pueblo vecino llamado El Mollar. La hicimos subiendo por el camino hacia el cerro de la cruz, y bajando por el otro lado de la montaña, esta vez sin camino y bastante mas empinado y rocoso. Para nuestra sorpresa, terminamos llegando a las nubes, observando su paso veloz por entre nosotros. Praderas verdes, muy verdes. Paisaje tucumano hermoso, relajante y digno de contemplar.
Luego retomamos el camino y en unas 2 horas llegamos a El Mollar, ambrientos como hienas salvajes (creíamos poder llegar para almorzar ahí, y terminamos cenando).
De regreso en nuestro Bungalow de Tafí (del tamaño de 2 colchones) solo nos resto dormir profundamente...
El próximo día nos encontraría con algunos percances. Día frío, nublado y lluvioso. De los 43 grados Tucumanos, pasamos a tiritar de frío en una terminal de ómnibus...
Resultó ser que, al intentar retirarnos de Tafí hacia Amaicha del Valle, la ruta estaba cortada.
Si señores!!! En Tucumán también hay piquetes, y en plena montaña. El problema es que desalojaron a unos "nn" de no se donde, y estos muchachos, cortaron la ruta, dejándonos barados en la terminal durante unas 5 horas. Durante este ir y venir dentro de la terminal, conocimos a una pareja de Bs As y a un húngaro, viajero ya desde hace unos meses.
Como siempre, pasaron las 5 horas, y ya entrada la noche nos encontrábamos en Amaicha del Valle, un poblado con un poco más de vida que el anterior, y bastante mas ortogonal en su trazado.
Amaicha aparentemente no prometía mucho para hacer. El calor volvió a ser agobiante y más teniendo en cuenta que, según informan, este pueblo posee 360 días de sol al año.
Al mediodía siguiente, bajo ese sol poderoso, decidimos hacer una caminata de 7 km hacia el dique los Zazos, donde sin mucho entusiasmo, nos habían hablado de una cascada donde uno se puede bañar y soportar un poco mejor la sequedad y el calor de la tierra árida.
El dique apareció, y con el una pequeña cascada que dejaba bastante que desear. Pasamos unas horas ahí, con la profunda duda de haber sido engañados por una cascada artificial creada por el hombre de pico y pala. Resolvimos continuar río arriba unos 30 minutos, y aquí vino la sorpresa... Un tremendo cañadón se abrió ante nuestros ojos y un camino por el medio del mismo nos condujo a aguas frescas, de poco caudal, pero naturales e increíbles a la vista.
Llegamos por la tarde noche a un pueblito con muy poca gente y bastante vacío. La llegada de la noche y la gran cantidad de nubes por los alrededores no nos permitió ver mucho mas allá del pueblo y sus pequeñas cuadras.
Al otro día comenzó la aventura: caminata a un pueblo vecino llamado El Mollar. La hicimos subiendo por el camino hacia el cerro de la cruz, y bajando por el otro lado de la montaña, esta vez sin camino y bastante mas empinado y rocoso. Para nuestra sorpresa, terminamos llegando a las nubes, observando su paso veloz por entre nosotros. Praderas verdes, muy verdes. Paisaje tucumano hermoso, relajante y digno de contemplar.
Luego retomamos el camino y en unas 2 horas llegamos a El Mollar, ambrientos como hienas salvajes (creíamos poder llegar para almorzar ahí, y terminamos cenando).
De regreso en nuestro Bungalow de Tafí (del tamaño de 2 colchones) solo nos resto dormir profundamente...
El próximo día nos encontraría con algunos percances. Día frío, nublado y lluvioso. De los 43 grados Tucumanos, pasamos a tiritar de frío en una terminal de ómnibus...
Resultó ser que, al intentar retirarnos de Tafí hacia Amaicha del Valle, la ruta estaba cortada.
Si señores!!! En Tucumán también hay piquetes, y en plena montaña. El problema es que desalojaron a unos "nn" de no se donde, y estos muchachos, cortaron la ruta, dejándonos barados en la terminal durante unas 5 horas. Durante este ir y venir dentro de la terminal, conocimos a una pareja de Bs As y a un húngaro, viajero ya desde hace unos meses.
Como siempre, pasaron las 5 horas, y ya entrada la noche nos encontrábamos en Amaicha del Valle, un poblado con un poco más de vida que el anterior, y bastante mas ortogonal en su trazado.
Amaicha aparentemente no prometía mucho para hacer. El calor volvió a ser agobiante y más teniendo en cuenta que, según informan, este pueblo posee 360 días de sol al año.
Al mediodía siguiente, bajo ese sol poderoso, decidimos hacer una caminata de 7 km hacia el dique los Zazos, donde sin mucho entusiasmo, nos habían hablado de una cascada donde uno se puede bañar y soportar un poco mejor la sequedad y el calor de la tierra árida.
El dique apareció, y con el una pequeña cascada que dejaba bastante que desear. Pasamos unas horas ahí, con la profunda duda de haber sido engañados por una cascada artificial creada por el hombre de pico y pala. Resolvimos continuar río arriba unos 30 minutos, y aquí vino la sorpresa... Un tremendo cañadón se abrió ante nuestros ojos y un camino por el medio del mismo nos condujo a aguas frescas, de poco caudal, pero naturales e increíbles a la vista.
Noche cervecera en Amaicha y rápido al sobre: el cansancio de la caminata y el sol se hacen notar rápido.
Al otro día bien temprano para Quilmes, junto a Buenos Aires, Hungría y Alemania (2 nuevos caminantes). 5 km de caminata para llegar a las ruinas de Quilmes. Ascenso por entre las mismas y mucha aridez. Paisaje hermoso, extremo calor del mediodía y puro sol sin una gota de agua en el camino.
El colectivo nos recogió en la ruta y nos llevó hasta Cafayate, desde donde escribimos. Linda ciudad, muy linda, bastante mas extensa que los poblados anteriores.
Ahora nos retiramos a contentar a nuestros estómagos, ávidos por engullir alguna delicia Salteña. Finalmente va una foto de la fachada de nuestra actual morada.
ESTAMOS SUPER! DE MARAVILLAS! QUE LINDO ES VIAJAR!
Todas las fotos, sin edición alguna en: http://share.shutterfly.com/action/welcome?sid=8AYtWLhkzbs2Wk¬ag=1
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